Introducción: A pesar del desarrollo tecnológico alcanzado en los medios diagnósticos y de monitorización, el Síndrome de Bajo Gasto Cardíaco constituye un problema  grave de salud, con una elevada morbilidad y mortalidad. Objetivos:Se mostrará  la analogía entre las variables fisiológicas recogidas con la exploración física y las de los diferentes sistemas de monitorización y el valor de la semiología cardiovascular. Desarrollo: El Síndrome de Bajo Gasto Cardíaco  es una entidad clínico, humoral y hemodinámico,  caracterizado por disminución de la perfusión  hística  y  del  aporte  de  O_², a pesar de presentar un adecuado volumen intravascular. Se utiliza para su diagnóstico y seguimiento la medición de múltiples variables fisiológicas:hemodinámicas, ecocardiográficas y de laboratorio. Estos parámetros proporcionan criterios objetivos que sustentan la opinión clínica y facilitan la valoración evolutiva del paciente. Todo este sistema de monitorización tiene un costo elevado y no siempre existe disponibilidad de equipos y/o personal entrenado en su manejo. La semiología, juega un papel fundamental en la evolución de estos pacientes.  Ejemplo de lo anterior es la exploración  del sistema nervioso central que es tan rica, de la piel que aporta elementos de valor como su aspecto, coloración,  temperatura y gradientes; de forma similar, la palpación de los pulsos arteriales  y el pulso venoso yugular suministra mucha información. Conclusión: El conocimiento de la semiología en el diagnóstico y seguimiento del BGC, es de vital importancia porque la monitoriación invasiva y no invasiva es muy útil pero no sustituye el juicio clínico, sino que lo complementa.

Palabras clave: Semiología, monitorización.